Con la excusa de modernizar una linea de producción, la empresa esconde el perverso objetivo de precarización laboral y la eliminación de históricas conquistas

En el marco del conflicto generado por la decisión unilateral de Arcor-Bagley de modificar el convenio colectivo de trabajo, el Ministerio de Trabajo de la provincia dispuso la conciliación obligatoria y citó a las partes para una nueva audiencia para el próximo martes 28 de junio en la sede de la cartera provincial

La situación fue denunciada por STIA Córdoba que, a través de su Secretario General y a la vez titular de la FTIA, Héctor Morcillo, expuso ante los distintos medios de comunicación locales y nacionales la aviesa intención de los empresarios de avanzar en la precarización laboral, eliminando conquistas históricas, como es el descanso de fin de semana, e imponer nuevos horarios de trabajo que afectan la realidad de 400 operarios y operarias de la planta».

Nuestro secretario explicó al medio iProfesional y a Radio Del Plata que «la empresa empezó a convocar al personal y proponerles trabajar los fines de semana en turnos de 12 horas y tener francos de lunes a viernes» y remarcó que «esto es lisa y llanamente una precarización laboral, jugando con la necesidad de la gente«.

Ante esta situación, el sindicato de la Alimentación de Córdoba reclamó una reunión con las autoridades de la empresa. La falta de respuestas derivó en un plan de lucha con paros, el bloqueo de los portones y asambleas que culminaron con la disposición por parte del Ministerio de Trabajo de Córdoba, de la Conciliación Obligatoria.

La conducción de STIA Córdoba ratifica su vocación dialoguista, pero a la vez ratifica que no mezquinará esfuerzos en la aplicación de medidas de acción directa en Defensa del Convenio Colectivo y los Derechos de trabajadoras y trabajadores, si la empresa continúa con su accionar anti-gremial